Se ha hablado mucho de la importancia de la lectura para la vida, así como de los beneficios de hacer de ella un hábito. Leer permite incrementar el vocabulario, ejercitar las capacidades de memoria, concentración, retención y comprensión; pero, adicionalmente, ayuda a normalizar los patrones de sueño y reducir los niveles de estrés.
El problema para hacer de la lectura un hábito, radica en lo acelerado del ritmo de vida que se lleva actualmente, donde el tiempo, que se puede dedicar a esta actividad, suele ser escaso, pero para evitar que se deje de disfrutar de un buen libro mostramos a continuación algunas novelas para leer en una sentada.
El extranjero de Albert Camus
Esta es una novela corta en la que se narra la vida de Meursault. Por medio de sus andanzas es posible ver reflejadas las carencias ideológicas que sufrió Europa tras verse herida y violentada por dos guerras mundiales. En esta, el protagonista refleja la filosofía del absurdo, la sensación de aislamiento y de desencanto frente a la vida.
El extranjero es la novela más representativa de Camus, la cual es a su vez un ensayo sobre la cotidianidad, que puede hacer que cualquiera, se vuelva insensible e indiferente. Esta es posible leer en una sentada, ya que una vez que se inicia su lectura es casi imposible parar hasta no llegar a la última palabra.

Portada del libro El gran Gatsby
El gran Gatsby de F. Scott Fitzgerald
Considerada como una de las más grandes novelas americanas. El relato versa sobre un personaje, Jay Gatsby, que a pesar de su riqueza no lograr sobreponerse a sus complejos y sentimientos de no pertenencia.
El personaje que nos presenta el escritor es el arquetipo de los años, donde son protagonista las noches sin tregua y los excesos.
Un cuento de navidad de Charles Dickens
En este se narra la historia de tres fantasmas que se le aparecen al acaudalado y tacaño señor Ebenezer Scrooge. Estos lo llevan a visitar momentos del pasado, presente y futuro para así enseñarle una valiosa lección. Es una de las obras de las que se ha hecho más adaptaciones y es muy fácil de leer.
El rojo emblema del valor, Stephen Crane
Esta obra de Crane es una novela de carácter pesimista y cruelmente realista en la que el escritor habla de las sensaciones honestas que tiene un joven cuando entra a enfrentarse a un acontecimiento bélico. Henry es el protagonista de esta historia que gira en torno a las dudas que van tomando forma dentro de una persona durante la guerra.
Este protagonista cuestiona su valentía, el valor de la vida humana, el hecho de si su miedo es diferente al del resto, si es inferior a los demás, etc., todo esto mientras se va percatando del absoluto absurdo de la guerra.
Estas son tres novelas para leer en una sentada con las que es posible comenzar a crear el hábito de la lectura sin que se vean interrumpidas el resto de las actividades diarias, ya que sus historias son tan cautivadoras que permiten hacer una lectura rápida de ellas.